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Noticias - Ciencia y Tecnologia

Agujero en capa de ozono en Polo Sur supera al del 2000

Gigantesco hoyo tiene tamaño de 29,5 millones de km cuadrados. Científicos peruanos detectan peligrosa reducción de ozono en Moquegua

GINEBRA, PARÍS [EL COMERCIO/AGENCIAS]. El agujero de ozono sobre la Antártida equiparó este año, en especial los primeros días de octubre, el tamaño récord de 29,5 millones de kilómetros cuadrados, poco más de tres veces el tamaño de China.

 

El área del llamado agujero --un adelgazamiento de la capa de ozono durante el invierno en el Polo Sur-- superó a la del año 2000, que fue de 29,4 millones de kilómetros cuadrados, según mediciones de la NASA, informó Geir Braathen, especialista en ozono de la Organización Mundial Meteorológica (OMM), con sede en Ginebra.

 

El tamaño del agujero compromete principalmente a naciones próximas como Nueva Zelandia y países extremos de Sudamérica.

 

La OMM, que forma parte del sistema de Naciones Unidas, señaló también que el déficit de la masa de ozono ha alcanzado un nivel nunca antes visto y que equivale a 39,8 megatoneladas. Ello ha causado enorme preocupación, pues la cantidad de partículas de gas de ozono que han quedado en el agujero es incluso inferior a la del 2000.

 

Las mediciones son realizadas tanto por la NASA como por la Agencia Espacial Europea (ESA), y son validadas por observaciones realizadas desde la superficie por una unidad de vigilancia del ozono de la OMM.

 

 

 

EL MÁS GRAVE
"Confirmamos que (el agujero) ha sido el más grave registrado y que no solo fue el más grande en superficie, sino que ha sufrido el mayor déficit de masa, lo que significa que hubo menos ozono sobre la Antártida que nunca antes", sostuvo el portavoz de la OMM, Mark Oliver.

 

Explicó que "el déficit corresponde a la cantidad de masa que está por debajo del nivel natural mínimo requerido para proteger a los seres vivos que se estableció hace varias décadas, antes de que empezara el desgaste severo del ozono".

 

La disminución de la capa sobre la Antártida este año se debe a la continua presencia de niveles extremos de sustancias que provocan la destrucción del ozono, además de vientos estratosféricos (entre 10 y 40 kilómetros sobre la superficie terrestre) particularmente fríos.

 

Según los científicos de la OMM, la talla y profundidad del agujero de la capa de ozono en el otoño europeo (nuestra primavera), la estación en la que alcanza su mayor tamaño, dependerá principalmente de las condiciones meteorológicas de las próximas semanas en la Antártida.

 

 

 

MÁS RADIACIÓN
"El adelgazamiento de la capa este año conducirá a más radiación ultravioleta en tierra", advirtió Braathen.

 

Demasiada radiación ultravioleta puede causar cáncer de piel y destruir plantas pequeñas al comienzo de la cadena de alimentación.

 

El adelgazamiento de la capa de ozono, en buena parte debido a productos químicos fabricados por el ser humano, expone a la Tierra a peligrosos rayos solares.

 

El agujero se ha ido formando a partir de mediados de la década del ochenta en las temperaturas muy bajas que marcan el fin del invierno en la Antártida. Generalmente, el agujero es más grande a fines de setiembre.

 

La OMM recalcó que esta situación demuestra la importancia de mantener la vigilancia sobre el cumplimiento por parte de los estados de la Convención de Viena (1985) y el Protocolo de Montreal (1987), ambos instrumentos internacionales destinados a la protección de la capa de ozono.

 

Este año, el invierno en la Antártida ha sido muy frío, informó la agencia meteorológica. Eso ha causado una mayor disminución del ozono.

 

Según la agencia, recién aproximadamente en el 2065 la capa de ozono podrá recuperarse y el agujero sobre la Antártida logrará cerrarse, siempre y cuando se reduzca drásticamente el lanzamiento de gases contaminantes a la atmósfera.

Radiación ultravioleta en Moquegua
El Perú es uno de los países que sufre casi en forma directa las consecuencias del agrandamiento del agujero de ozono. Así lo confirmaron científicos y astrónomos de la Comisión Nacional de Investigación y Desarrollo Aeroespacial (Conida), quienes revelaron que en base a mediciones que se efectuaron recientemente en las zonas meridionales de nuestro país, y en especial en el departamento de Moquegua, se ha encontrado una disminución alarmante de ozono y, por consiguiente, una elevación preocupante de radiación ultravioleta.

 

"La cantidad de radiación ultravioleta que se registró en las últimas semanas corresponde al índice de UV 16 (radiación ultravioleta 16). Debemos aclarar que esta vigilancia del Conida se realiza desde más de un año", señaló el astrónomo Walter Guevara.

 

Los especialistas informaron que ante esta consecuencia directa que viene causando el aumento del tamaño del agujero de ozono, se ha advertido a las autoridades de Moquegua para que adopten medidas de protección y así evitar problemas de radiacion UV.

 

Entre ellas se ha dispuesto el uso de 'adecuadores antirradiación' en especial para trabajadores que laboran en las calles, lentes especiales con protección UV, uso de trajes que cubran completamente su cuerpo durante la exposición solar, entre otros.

EN PUNTOS
La pérdida del nivel de ozono
Dos décadas
Recientes informes indican que es previsible que la talla de ese agujero sea importante durante las dos próximas décadas y que puede esperarse una mejora únicamente después de ese período.

 

 

 

Fuerte daño
La capa de ozono ha sido fuertemente dañada por productos químicos de fabricación, sobre todo la clorina y los clorofluorocarbonos (CFC). El nivel de ozono en el planeta ha perdido un 0,3% cada año durante la última década.

Confiman importante hallazgo arqueológico en extremo norte de Chile

SANTIAGO, 3 jul (Xinhua) -- Un importante hallazgo  arqueológico fue detectado durante los trabajos de reparación de  caminos que se ejecutan en el valle de Codpa, en la región de  Tarapacá, en el extremo norte del territorio chileno, según  confirmó este lunes el secretario regional de obras públicas,  Rolando Orellana. 

     Se trata de utensilios domésticos e indicios de cementerios que podrían corresponder a pueblos que habitaron el lugar durante el  período precolombino (900 d.C. a 1500 d.C.), entre los que se  encuentran los Collas, Lupacas, Pacajes y Carangas. 

     La autoridad chilena informó que la empresa a cargo de la  reparación detectó estos posibles hallazgos, por lo que se  suspendieron las faenas y el Consejo de Monumentos Nacionales  efectuó el respectivo diagnóstico, en el marco de la protección  patrimonial establecida por Ley. 

     Una de las zonas descubiertas dejó expuestas al menos tres  estructuras funerarias o cistas de piedras que debieron ser  subterráneas, y que se hallaban cubiertas por materia de aluvión;  mientras que hacia uno de los costados, el cauce de agua de una  pequeña quebrada reveló al menos tres tumbas en pozo, circulares,  en cuyos fondos se observaron restos óseos humanos. Fin 

5 Desafios Ciencia Chilena

Los 5 desafíos de la ciencia chilena
 
Para decirlo en buen chileno: esta es la hora de los "quiubos". Si Chile quiere ser un país desarrollado, tiene que poner cabeza en todo esto. O financiar a los que ponen cabeza. Un país sin ciencia, tecnología e innovación no tiene futuro. La canción la hemos escuchado todos. Ahora hay plata ­cobre, en rigor-, hay científicos de primer nivel y hay muchas, muchas ideas. ¿Y ahora qué? ¿Y ahora quiénes?

Por Francisco Aravena F.

Chile 2006, país de momentos. Momento histórico. Momento delicado. Momento clave. Momento de la verdad. A medida que la ilusión de convertirse en un país desarrollado se va transformando en promesa y parece vislumbrarse al otro lado de un lustroso camino de cobre, el tema de cómo aprovechar el bendito "momento" se ha instalado en el debate público.

"Muchos países en la historia de la humanidad han estado en momentos históricos. En algunos casos le han apuntado y en otros se han equivocado", dice el Premio Nacional de Ciencias Juan Asenjo. "Chile siempre se ha equivocado".

El profesor Asenjo ha tenido la oportunidad de presenciar y participar del actual debate en primera fila. El año pasado integró el Consejo Nacional de Innovación que formó el Presidente Lagos para estudiar cómo repartir los ingresos derivados de la aplicación del royalty a la minería, y ha participado en otras instancias de discusión del tema. Y dice que está optimista. "Si yo tuviera que apostar dinero, diría que las cosas se están haciendo bastante bien", dice Asenjo, un bioquímico doctorado en Londres que hace once años volvió a Chile. "Eso no quiere decir que de repente no me deprima, pero creo que existe la posibilidad".

La posibilidad, coinciden prominentes científicos chilenos, está dada, en parte, por los buenos resultados de políticas estatales de fomento a la ciencia y tecnología con instituciones como Conicyt y programas como Fondecyt (creado en 1982), Cátedras Presidenciales, Iniciativa Científica Milenio ­que ha enfrentado críticas por sus criterios de asignación de recursos­, Programas Bicentenario de Ciencia y Tecnología y las Becas Presidente de la República, por ejemplo. Otro factor determinante para llegar a este momento ha sido el regreso ­por razones que van desde las mayores oportunidades de desarrollo a las políticas­ de varios científicos chilenos que realizaron su formación en el extranjero. Como Asenjo, que volvió de Londres "en el momento preciso", como reconoce.

Estaban pasando cosas, o podían pasar. Asenjo vino a armar un programa de doctorado a la Universidad de Chile, financiado por la Fundación Andes. "Una de las debilidades de mi proyecto, me dijeron, era que no iba a haber ingenieros que quisieran hacer un doctorado, porque se iban a trabajar en la empresa para ganar plata", recuerda. "Me di cuenta de que la sociedad del shopping mall era intelectualmente un poco hueca, entonces esto lo encontraron un desafío interesante". Asenjo cuenta que los dos primeros años fueron difíciles, pero luego se encontró con los resultados. "Yo jamás pensé que iba a ver tanto interés entre los estudiantes", dice. Hasta la fecha se han doctorado ahí 13 científicos, y hay nueve candidatos.

El más reciente Premio Nacional de Ciencias, Rafael Benguria, lo expresa así: "Es un momento delicado para la ciencia", afirma con cautela. "Y lo que suceda ahora puede ser crucial para el desarrollo futuro".

Hace poco más de seis meses, Asenjo "repatrió" a una de sus científicas, Ziomara Gertdzen, desde Minnesota (ver recuadro). "Le dije: ¿Hay algo de lo que tenías en Minnesota que no exista acá? Me dijo que nada. Esa es mi labor".

El bioquímico Rafael Vicuña, decano de la Facultad de Ciencias Biológicas de la Universidad Católica, coincide con que en Chile están dadas las condiciones para que un científico formado en las mejores instituciones en el extranjero trabaje en Chile. En su facultad, indica, hay actualmente 160 estudiantes de doctorado. "El triple de estudiantes que el número de profesores", apunta. Algo que hace una década era "impensable": había más profesores que el número de alumnos de doctorado.

Rafael Benguria, profesor titular del Departamento de Física de la UC, ha visto cómo ya en el pregrado hay mayor interés de los alumnos. Actualmente, cuenta, tiene 250 alumnos de pregrado. Diez veces más que hace diez años.

Hay interés, hay programas y, ahora, hay dinero. "Si no lo hacemos bien, nos vamos a frustrar", dice Benguria.

¿Qué hacer para que el desarrollo gracias a la ciencia no se quede, simplemente, en ciencia ficción?

1. MEJORAR LA EDUCACIÓN SECUNDARIA

" Nosotros nos damos cuenta cuando recibimos a los alumnos en primer año de la gran carencia en su educación científica, porque no han tenido una buena formación en los colegios o liceos", apunta Rafael Vicuña. "Porque los profesores de ciencia saben muy poca ciencia. Los profesores de ciencia normalmente han estudiado Pedagogía en Biología. Y qué estudias ahí: historia de la educación, filosofía de la educación, psicología de la educación, currículo uno, currículo dos... Oye, pero si es biología lo que vas a enseñar. Pero no, al final te hacen clases de biología, que ni siquiera te hacen los biólogos. Entonces el conocimiento que tienen los profesores de su disciplina es muy escaso, muy rudimentario", comenta el bioquímico.

"Está todo el mundo de acuerdo en que lo más importante son los profesores. Creo que en eso hay unanimidad en el discurso", agrega Rafael Benguria. "Todos sabemos que lo crucial es darles más estatus a los profesores, mejorarles el sueldo, tener los mejores profesores posibles en los colegios. Pero a veces entre el discurso y lo que se hace hay falencias", explica. Dice que, en su opinión, en los 90 se le dio una prioridad a la reforma de los programas, en lugar de la formación de los profesores.

Son muchas las comparaciones internacionales que se hacen con países que han "dado el salto": Finlandia, Suecia, Israel. La comparación con Corea es una de las más interesantes: ese país era un país pobre hasta hace 40 años. El profesor Juan Asenjo aporta un dato. "En Corea un profesor secundario ­ajustando los sueldos­ gana 1 millón 200 mil y en Chile 400 mil. En Corea gana lo mismo que en Finlandia", grafica. "Aquí, si voy a una reunión social y digo que soy profesor de colegio, me miran para abajo. Si digo que soy profesor universitario, me miran para arriba. El punto es que como no hay sueldo no hay prestigio".

Hay también un tema de enfoques, como lo grafica Roberto Rondanelli, un joven ingeniero químico que actualmente realiza su doctorado en el Massachusetts Institute of Technology (ver recuadro). En su opinión, la baja de la calidad de la educación científica en los colegios es la principal desventaja de Chile hoy. "Mucha ciencia requiere hoy en día bien pocas cosas: lápiz, papel, un computador, acceso a bibliotecas y bases de datos", explica. "Lo imprescindible para realizar ciencia, aunque sea de perogrullo, es el científico".

Y a ese científico hay que descubrirlo y motivarlo. "El paradigma educativo de un profesor al frente de sus alumnos recitando fórmulas o partes de la célula o forzando a los estudiantes a aprenderse los pesos atómicos de los elementos, no motiva a los alumnos a la curiosidad y los aleja de la ciencia", opina Rondanelli. "Se muestra a la ciencia como una máquina que provee respuestas, cuando en la realidad la ciencia tiene más que ver con las preguntas y el método que con las respuestas", concluye.

Rafael Vicuña aporta "una nota esperanzadora": "Ahora las facultades de educación reciben a licenciados en distintas disciplinas, entre ellas las científicas, y en un año les dan el título de profesor. Al fin", destaca. "Yo espero que cada vez más jóvenes con licenciatura en física, en biología, en matemáticas, quieran estudiar un año más y sacar el título de profesor. Y que la gente que enseñe a nivel básico y medio tenga una formación científica más que pedagógica".

2 LA CANTIDAD SÍ IMPORTA

Esto es bueno: "Hay excelentes científicos. Lo que más me gusta, que es un agrado, es que uno va a diversas partes y le preguntan por nombres de colegas chilenos", comenta Rafael Benguria. Antes, explica, los científicos chilenos exitosos se destacaban como excepciones. "Ahora uno va afuera y se habla de grupos de investigación. Y es mucho mejor cuando hay equipos", añade Benguria. Pero son muy pocos.

En otras palabras: en Chile hay buenos científicos, pero muy pocos. En números: hay 2.247 investigadores productivos ­es decir, que están publicando el resultado de sus trabajos­, según el directorio del año pasado de la Academia Chilena de Ciencias, trabajo realizado en el marco de su estudio "Análisis y proyecciones de la ciencia chilena 2005".

El científico Iván Rapaport, quien volvió a Chile tras doctorarse en París (ver recuadro), coincide. "No es un problema de condiciones, sino de números. Estamos lejos de alcanzar la cantidad mínima necesaria. Con más científicos no sólo vamos a tener mejor ciencia, sino que, indirectamente, mejores profesionales: ingenieros, médicos, economistas, biotecnólogos, urbanistas", concluye.

"No basta con tener grandes genios", agrega el profesor Benguria. "Si uno tiene a un Einstein chileno, no es suficiente. Uno necesita tener muy buenos científicos, pero también necesita tener muchos científicos".

Ha habido avances en la materia, por supuesto. Según el estudio de la Academia Chilena de Ciencias, en 1993 existían en Chile 15 programas de doctorado en ciencia y tecnología. Ahora existen 91. Aun así es, según el mismo informe, "un número insuficiente para poder responder al desafío del desarrollo en nuestro país". En el mismo estudio, la Academia recomienda que el Estado, las universidades y el sector empresarial "concuerden un programa integral para el desarrollo y captación de profesionales altamente calificados para generar conocimientos y aplicaciones novedosas".

O sea, generar demanda. "Hay que aumentar el número de científicos en Chile, Êy por eso hay que fortalecer el posgrado y crear más becas de doctorado", resume Vicuña. "¿Y dónde van a trabajar esos científicos?".

La respuesta ya viene.

3 QUE EL SECTOR PRIVADO CONTRATE CIENTÍFICOS

Tal cual. Instrumentos existen. Hay programas que fortalecen el vínculo empresa­universidad, por ejemplo, y otros, como los consorcios, para que sectores productivos ­como los productores de leche­ demanden trabajo científico de alto nivel para beneficio colectivo. Conicyt también tiene un concurso para subsidiar la contratación de "personal altamente calificado" en las empresas privadas. Pero parece haber consenso en que esa demanda es insuficiente, y que podría ser más. "Buenos científicos y buenas ideas en Chile hay. Falta que las empresas implementen departamentos de investigación y desarrollo, que se forme el vínculo entre los científicos trabajando en sus laboratorios y los empresarios e inversionistas, y eso es algo que de a poco está comenzando a ocurrir", comenta Ziomara Gerdtzen. "Invertir en ciencia puede ser rentable", asegura.

"La ciencia chilena va a crecer cuando el sector productivo empiece a absorber científicos", plantea Rafael Vicuña. "Y si tú ves hoy en los países desarrollados las instituciones que publican papers, muchas son empresas", destaca, poniendo un ejemplo que conoce: el de Bioforest, el laboratorio de Celulosa Arauco.

"Hoy día son muy excepcionales los casos de empresas que contratan doctores en ciencia. Hay una cosa incluso cultural, se asustan", comenta Vicuña. "Suponte que los distintos productores de vino tuviesen un gran Instituto del Vino. Que hiciera investigación para todas las viñas", ejemplifica el bioquímico. "Créeme que esa gente va a estar solucionándoles problemas a las viñas, pero al mismo van a estar haciendo hallazgos de nuevos conocimientos que van a ser publicados en revistas puramente científicas. Algunos de esos hallazgos van a ser procesos, van a ser aplicaciones, pero muchos otros hallazgos, como aislamiento de un gen, secuenciación de un gen, expresión de ese gen, van a ser nuevos conocimientos publicados en revistas científicas. Y eso es lo que ves en la industria biotecnológica".

El profesor Benguria apunta al otro lado de la cadena, ejemplificando con la gran brecha que existe entre el desarrollo científico de Brasil y el de Chile (destaca que Brasil está más cerca de Estados Unidos que Chile de Brasil). "Si usted ve la industria brasileña comparada con la industria chilena, también ve una brecha tremenda. Van de la mano las dos cosas. En la industria chilena la gente lo está tratando de hacer bien, se sacrifica; pero uno visita la industria brasileña y se queda con la boca abierta".

La lógica del mercado, entonces, debería encargarse de este punto. Si el mercado sabe leer, claro.

3 MÁS INVERSIÓN ESTATAL

"Le voy a dar un ejemplo muy simple: si un país invierte en salud, eso no tiene ningún impacto en el futuro. Si invierte, se mueren unos pocos menos; si no invierte, se mueren unos pocos más, para ser bien crudos", subraya el Premio Nacional Juan Asenjo. "Pero si no invierte en educación, ciencia y tecnología, posterga el futuro".

"No es que yo esté diciendo que no hay que invertir en salud", explica. "Lo que estoy diciendo es que hay decisiones que la gente tiene que tomar".

Actualmente, Chile invierte el 0,7 por ciento de su Producto Interno Bruto en el área de ciencia, tecnología e innovación. Según la recomendación de la Academia Chilena de Ciencias, el país debería elevar esa cifra a 1,3 por ciento el año 2010, si quiere estar "en condiciones básicas para competir internacionalmente".

¿Cuánto dijo? Juan Asenjo propone otra cifra. "Finlandia invierte el 3 por ciento de su PIB en ciencia y tecnología. Si Chile invierte el 0,7 por ciento, la única conclusión que podemos sacar de eso es que nosotros somos tanto más inteligentes que los finlandeses que nos basta con el 0,7. No podemos, ¿cierto?", explica, didácticamente. "Mejor pongámonos las pilas e invertamos al 3 por ciento".

Si, como se espera, los científicos están aumentando, deben aumentar también los fondos concursables. De otra manera, habrá cada vez menos dinero para los proyectos individuales. Eso repercutirá más gravemente en la ciencia experimental, que requiere de más infraestructura para realizar su trabajo.

Invertir en ciencia, a fin de cuentas, es comprar autonomía, como destaca Rafael Vicuña. "Debemos tener la convicción de que queremos ser autónomos en la ciencia. Al punto de que si bien a lo mejor no vamos a llegar a cultivar todas las disciplinas, sepamos cuáles vamos a cultivar y cuáles no", explica. "Si no tienes esa autonomía, si eres productor de algo y no tienes acceso al know how ¿quién manda? ¿Sabes quién manda? El representante de los equipos. Te va a decir: esto es lo último que hay en secadores de celulosa, o esto es lo último en riego automático. Ese tipo va a mandar, el representante de la compañía que vende los equipos", concluye.

El Estado ha invertido en ciencia, destaca Asenjo. Pero lo decisivo viene ahora. "Es el gobierno de Michelle Bachelet el que tiene que tomar la decisión. Y eso depende en gran medida de las recomendaciones que haga la Comisión Nacional de Innovación para la Productividad", dice en relación al grupo que ahora encabeza el ex ministro Nicolás Eyzaguirre.

5 INTEGRACIÓN TOTAL: TODOS CON TODOS

¿Le parece que esto que está leyendo es "interesante"? Bueno, no lo es.

No este reportaje, por cierto, sino el tema de fondo: el trabajo de la ciencia y tecnología. "Hay un desconocimiento de lo central que es la ciencia para el desarrollo. Se ve como algo importante, pero accesorio", comenta Rafael Benguria. "Es mucho más importante que haya una gran cantidad de gente que haga cosas muy sofisticadas, aunque no se entienda", explica. "Lo principal es que la gente a nivel de posiciones relevantes, ministros, parlamentarios, entiendan. Y no creo que todo el mundo entienda", comenta el Premio Nacional de Ciencias 2005. "El nivel de la discusión en Chile es bien primitivo todavía. No tenemos muy buenos medios de comunicación todavía. La gente se asusta de leer un artículo largo con pocas figuras, con pocas fotos. Y la discusión política es bien pobre acá".

Ese es un desafío clave para los científicos: que la sociedad chilena ­desde quienes toman las decisiones a las personas comunes y corrientes- desarrollen una mayor cultura científica: que la investigación sea valorada como algo fundamental, que las decisiones políticas se tomen antes que nada con criterio científico.

"Nos posiciona distinto como sociedad que sepamos que podemos desarrollar conocimiento y ser tan competitivos con los países del hemisferio norte", destaca Juan Asenjo. "Ese es un punto que no hemos asumido. Es preocupante que no nos creamos el cuento, que sigamos siendo provincianos. Que nosotros creamos quepodemos tener buenos poetas, pero que no podemos ser capaces de salir a vender tecnología".

Claro, la cultura, por ejemplo, es importante. Pero la importancia de la ciencia es más fundamental, tiene un impacto más profundo y directo. "La ciencia no está para vestir a nadie. No es entretenida", recalca el profesor Benguria. "La ciencia no es lo mismo que la cultura. Una vez leí en una revista de Matemáticas: si usted dice que las matemáticas son como la cultura, le van a dar los mismos fondos que le dan a la cultura. Y es cierto. Yo soy amante de la cultura, pero los fondos que se necesitan son distintos".

Por eso, los científicos chilenos han asumido una labor más activa en la difusión. La Academia Chilena de Ciencias, por ejemplo, pretende transformarse en un órgano de consulta técnica para los parlamentarios a la hora de discutir proyectos que necesiten una asesoría científica. Rafael Vicuña es miembro del Instituto Libertad y Desarrollo, y dice que ha ido muchas veces al Parlamento a dar su opinión de diversos temas. "Voy bastante. Pero voy porque me conocen y sigo yendo. Pero no existe un sistema para acceder a la opinión de expertos", explica. "¿Por qué te llaman para el proyecto de clonación? Porque alguna vez escribiste un artículo en El Mercurio, y te vuelven a llamar, porque te conocen. Pero nunca hay un llamado a la Academia de Ciencias para que se pronuncie sobre los temas. O para que encargue estudios", ejemplifica Vicuña.

Otro intercambio importante es el que tengan los científicos entre ellos. "En Chile antes la gente era súper feudal. Si estudiaba en la Universidad de Chile se quedaba ahí; si estudiaba en la Católica, se quedaba ahí. Se producían rivalidades poco inteligentes", comenta. "Afortunadamente eso está cambiando: hay colaboración entre las universidades, el feudalismo se está acabando, alguien puede estudiar acá e irse a trabajar a la Chile y viceversa".

Y lo mismo se puede proyectar internacionalmente. Benguria pone un ejemplo excepcional, pero revelador: esta semana se doctoró bajo su dirección un alumno alemán, que volverá a su país con un doctorado chileno bajo el brazo.

Fomentar el intercambio, por supuesto, también requiere de inversión. "Faltan recursos destinados para la interacción internacional", plantea Juan Asenjo. "Todos los científicos chilenos tienen contactos en todas partes del mundo. Es muy positivo que los estudiantes de doctorados chilenos que trabajan acá, vayan al extranjero por seis meses a laboratorios de primer nivel, así no tenemos que invertir en esos laboratorios y usamos los recursos del hemisferio norte. Pero para eso tenemos que sacar dinero de todas partes; no hay un programa explícito para que de forma sencilla uno mande un estudiante de doctorado por un año a un laboratorio top en MIT, en Manchester, en Stuttgart, en donde sea", explica. "Para poder hacerlo uno tiene que hacer todo tipo de piruetas".

¿Y si se nos pasa este "momento histórico"? ¿Y si Chile se equivoca otra vez? Bueno, no es el fin del mundo. Como lo advierte el profesor Asenjo, un país desarrollado no es necesariamente un país más feliz. No para él, al menos. "Cuando me vine a Chile hace 11 años, me vine al Chile de las carretas de bueyes", comenta. "Si Chile no quiere pasar a ser un país desarrollado, no tengo ningún problema, yo igual sigo contento con el país".
isco Aravena F..

Gobierno presentó nuevos sistema de ayudas estudiantiles para la educación superior

Santiago, 13 de septiembre del 2005.
COMUNICADO DE PRENSA 208/2005

En ceremonia que encabezó el Presidente de la República:

Gobierno presentó nuevo sistema de ayudas estudiantiles para educación superior

  • Todos los alumnos de universidades tradicionales que estén dentro de los tres primeros quintiles de ingreso y obtengan más de 475 puntos en la PSU, recibirán 100% de financiamiento estatal con crédito y becas.

  • De ellos, quienes tengan más de 550 puntos en la PSU y estén dentro de los dos primeros quintiles de ingreso, recibirán una beca de un millón de pesos anuales.

  • Los alumnos de universidades privadas, institutos profesionales y centros de formación técnica acreditados que obtengan más de 475 puntos en la PSU tendrán acceso a crédito con aval del Estado.

  • Los alumnos de universidades privadas acreditadas con más de 550 puntos en la PSU podrán postular a la Beca Juan Gómez Millas, mientras que los estudiantes de centros de formación técnica e institutos profesionales tendrán acceso a la Beca Milenio. 

El Ministro de Educación, Sergio Bitar, anunció que el próximo año los recursos para ayudas estudiantiles de la educación superior alcanzarán a cerca de 150 mil millones de pesos, cifra que “representa un aumento en un año del orden del 24% real, el más alto de la historia y casi cuatro veces lo que crecerá la economía este año”.   

El Secretario de Estado presentó la nueva Política de Ayudas Estudiantiles para la Educación Superior durante una ceremonia que encabezó el Presidente de la República, en el hall central del Mineduc.

“Presidente, hoy cumplimos un compromiso de su gobierno: la familia chilena, los jóvenes chilenos tienen hoy más igualdad de oportunidades. Chile aprovechará mejor los talentos de sus jóvenes para construir una sociedad mejor”, dijo la autoridad ministerial al dar a conocer la distintas opciones de financiamiento con que contarán los jóvenes a partir del próximo año.

Precisó que el Gobierno propondrá al Parlamento la aprobación de un volumen sustancial de recursos para cumplir los compromisos anunciados. Estos requerimientos implican:

  • Aumento de crédito fiscal para Fondo Solidario (Ley 19.287)

  • Mejoramiento de recuperaciones, Tesorería (Ley 19.989), Reprogramación (Ley 19.848)

  • Incremento de becas de arancel para universidades del Consejo de Rectores (Bicentenario), becas Juan Gómez Millas y Nuevo Milenio.

  • Nuevo monto de garantías del Estado (Ley 20.027) 

  “Como consecuencia, durante el gobierno del Presidente Lagos las ayudas estudiantiles crecerán, en términos reales, de 82 mil 600 millones en marzo del 2000 a 150 mil millones en marzo del 2006. O sea, en pesos del mismo año, habrá crecido en 81,6%”, señaló el Ministro Bitar.  

Agregó que los beneficios del nuevo sistema se asignarán a partir del 2006, para lo cual los jóvenes deberán postular a las distintas ayudas solamente a través del formulario electrónico en los períodos que se informarán oportunamente.

Por su parte, el Presidente Ricardo Lagos recordó que cuando fue candidato a la primera magistratura señaló expresamente que el esquema de becas y créditos estudiantiles se extendería de manera que ningún joven con talento y mérito quede fuera de la enseñanza superior por motivos económicos.

El Primer Mandatario dijo que el incremento en el presupuesto para el 2006 “implica que todos los estudiantes con mérito que pertenecen al 60% de las familias de menores ingresos del país tendrán asegurado su ingreso a la educación superior. Creo que este es un tremendo esfuerzo que hace la sociedad chilena, que hacen los 15 millones de chilenos, pero también es un reconocimiento al esfuerzo que se ha hecho en este ministerio”.  

Científicos dicen que podríamos estar en una realidad virtual

Científicos dicen que podríamos estar en una realidad virtual

Dos científicos británicos sugieren que la realidad tal como la conocemos podría ser una ilusión o una supermanipulación creada por una mega-supercomputadora, como en el filme Matrix. El físico Martin Rees y el matemático John Barrow, dos respetados científicos británicos, se preguntan si toda la materia y la inteligencia, tal como las conocemos, no son la creación de una mega-supercomputadora que se encuentra en alguna parte del Universo.

"Hace algunas décadas, las computadoras sólo podían simular modelos muy simples. Ahora pueden crear mundos virtuales con muchísimos detalles", declaró Rees. Martin, un astrónomo que trabaja en la prestigiosa Universidad de Cambridge, se atreve a ir más lejos en estas elucubraciones y se pregunta si podríamos estar en una simulación semejante.

En ese caso, el universo no lo comprendería todo, sino tan sólo una parte de un conjunto que Rees y Barrow llaman el ‘multiverso’. Barrow, otro profesor de Cambridge, sostiene en un artículo académico que durante mucho tiempo se supo que una civilización ligeramente más avanzada que la nuestra podría simular "universos en los cuales entidades conscientes podían surgir y comunicarse entre ellas".

En una sociedad mucho más experta en informática y con una tecnología mucho más avanzada, "en lugar de limitarse a simular su clima o la formación de galaxias, como hacemos nosotros, ellos podrían ir más lejos y observar el surgimiento de estrellas y sistemas planetarios", sostuvo.

"Luego, una vez que incorporaran las reglas de la bioquímica en sus simulaciones astronómicas, serían capaces de observar la evolución de la vida y la conciencia", agregó. Los dueños de las máquinas del universo podrían "observar el crecimiento de las civilizaciones y comunicar entre sí, discutir sobre si existe un Gran Programador en el Cielo que podría intervenir según su voluntad, desafiando las leyes de la naturaleza que se observan habitualmente", insistió Barrow.

La teoría de los dos científicos de Cambridge no cuenta con mucho respaldo entre sus pares. Seth Lloyd, profesor de Ingeniería Mecánica Cuántica en el Massachusetts Institute of Technology (MIT), subrayó que una simulación semejante requeriría una computadora tan grande que la imaginación no llega a concebirla, en un artículo publicado el fin de semana pasado en el Sunday Times.

Fuente: AFP

Los logros científicos más importantes del 2004

Los logros científicos más importantes del 2004

Uno de los diarios científicos más importantes en el mundo ha publicado su lista anual de logros, el orden de importancia, como cada año, ha dividido a la comunidad científica entre los que prefieren la clonación en lugar de la aventura marciana.
 
El profesor Christopher Higgins, director del Centro de Ciencias Clínicas e Investigación Médica en Londres, lo tiene muy claro. Para él, el descubrimiento del año fue realizado en la Tierra y no tuvo nada que ver con las aventuras de Espíritu y Oportunidad en el planeta rojo.
 
“Si hubiesen encontrado vida quizás lo hubiera considerado, pero rastros de océanos y agua no me convencen”, aseguró el científico en el diario Science, uno de los más importantes en el mundo y encargado, año tras año, de elegir los descubrimientos y experimentos científicos más importantes en el curso de doce meses.

Science eligió la aventura marciana como el logro científico del año pero Higgins, junto a otros científicos, no está de acuerdo.
 
Para ellos, lo más importante para la humanidad en el 2004 fue el trabajo realizado por un equipo en Corea del Sur que logró clonar, por primera vez, embriones humanos.

“La trascendencia de este trabajo no sólo abre un camino más amplio y conocido hacia la clonación terapéutica sino que, además, tiene implicaciones filosóficas de una magnitud impresionante.
 
El hecho de que pueda hacerse, de que podamos clonar a un embrión humano, nos aleja de los misterios que rodean a los seres humanos, creencias que nos dicen que somos diferentes y que poseemos un alma, algo que, francamente, se trata de pura imaginación”, aseguró el científico.
 
“La clonación humana permite que nos demos cuenta que no somos distintos de cualquier otro animal, podemos ser clonados como un gato o un perro.
 
Es el objetivo real de la ciencia, entender de dónde venimos y cuál es nuestro propósito y la clonación nos acerca a las respuestas a estas preguntas, puede que a la mayoría de las personas no le guste lo que encontramos, ya que las respuestas sugieren que no existe tal propósito, pero es extremadamente importante que lo sepamos”.

A pesar de que una mayoría de científicos concuerda con Higgins, otros afirman que el descubrimiento de una nueva especie humana en la isla de Flores en Indonesia debió llevarse el primer lugar como el experimento del año. El estudio, publicado en el diario Nature, fue uno de los más votados.

Esta vez no fue un verdadero dolor de cabeza

“Esta vez no me  causó un verdadero dolor de cabeza elegir al ganador. Es imposible complacer a todos los científicos con nuestra lista, todos los años es lo mismo, sin embargo, en esta ocasión estuvimos debatiendo entre estos tres temas, Marte, la clonación y los enanos en Indonesia y creemos que la aventura en Marte ha cambiado la forma en que vemos el espacio, los demás planetas y hasta la vida misma, que ya no es única para nuestro planeta”, explicó Donald Kennedy, editor del diario Science.

Los logros obtenidos por los tres experimentos no sólo son significativos para sus respectivas áreas sino que, en común, abarcan un profundo conocimiento sobre lo que hemos sido como especie en términos antropológicos, que podemos ser copiados biológicamente como cualquier otro animal y que vivimos en un Universo que aloja sorpresas en cada una de sus galaxias y planetas. Los demás experimentos también tienen su importancia.

Los diez estudios más importantes del año

Primer lugar:
Las evidencias e imágenes enviadas y capturadas por los vehículos de la NASA en Marte se llevaron el primer lugar en la lista de Science.

Segundo lugar:
La enana indonesa descubierta en la isla de Flores ha sido elegida por los arqueólogos como el descubrimiento del año en esta área del conocimiento.

Tercer lugar:
La clonación de embriones por surcoreanos  es para muchos la investigación del año. Sus implicaciones no sólo abarcan la medicina sino que desencadena un sinnúmero de preguntas filosóficas.

Cuarto lugar:
El mundo de los gases condensados y ultra fríos ha sido el gran logro de este años para los físicos.
 
Quinto lugar:
La basura genética, pedazos de ADN que al parecer no tenían una función importante, es, en realidad, esencial para controlar cuando un gen debe activarse.

Sexto lugar:
Los astrofísicos ocuparon este lugar por el interesante y primer descubrimiento de dos estrellas gemelas “pulsar” que orbitan una alrededor de la otra.
 
Séptimo lugar:
En el área de la ecología, las terribles noticias del descenso drástico en la biodiversidad del planeta ocupó un lugar entre los diez.

Octavo lugar:
El agua fue estudiada a fondo este año y los científicos descubrieron que su estructura y conducta química puede cambiar la cara de muchas ciencias
 
Noveno lugar:
Este año vio nacer una nueva forma de conseguir medicinas para los pobres del mundo. Se trata de las asociaciones entre medios públicos y privados.

Décimo lugar:
Una nueva forma de encontrar microorganismo, sólo toma una muestra de agua y comienza a identificar los genes que se encuentran dentro de ella